El día 13 dejé Malaga, gente excepcionalmente inolvidable, un oficio de prensa coincidiendo con el suicidio de Larra. En su 180 aniversario, tomé el tren.
"Ayer aún hubiera dado toda mi sangre por oír un sí..., ¿por qué razón no soy ya completamente feliz? "
Con esta clara clara expresión de Larra... Me despido de vosotras.
Hace 10 años
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1 comentario:
las despedidas siempre son tristes... pero piensa en los reencuentros!!
besos
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