Querido Fotolog

La falta de identidad, de autoestima y la necesidad de atención que tienen las personas que salen con su mini-cámara de fotografía de ¿50 Mpx? (al menos así la emplean) cada noche, con la única finalidad de registrar todo lo que pasa para informar a sus allegados más lejanos (vaya la contradicción) en ese querido espacio por todos ellos (fotolog)… ME ATERRA.

Ejemplo:

21.30: Mi cuerpo estaciona en una cervecería. Y noto que la gente que me iba a acompañar ya está allí en conjunto de cuatro. Todos con sus nuevos móviles intentando pasarse fotografías y canciones…
21.40: Pido cerveza.
21.45: Terminada cerveza.
21.47: Pido cerveza
22.00: Termino la cerveza
22.02: Nos vamos a un “restaurante”.
22.15: Deciden ir al peor restaurante de la ciudad a mi parecer.
22.35: Me siento en el restaurante intentando aguantar la respiración.
22.37: Una fotografía
22.38: Otra fotografía.
22.39: Otra fotografía.
22.42: Otra fotografía.
22.43: Pido una ansiada cerveza.
22.43: Simultáneamente: Una fotografía a la que titularán: Mi amigo no sabe otra cosa que beber.
22.45: Otra fotografía:
22.47: Mi pensamiento se abstrae y me dice que Kafka también tenía problemas de identidad,
22.48: Se me acerca mi compañera de nutrición en escorzo por mi derecha y Otra foto.
22.49: Siguiendo con mi leve y fugaz pensamiento… Sin duda la falta de identidad de Kafka era de otra índole.
23.50: Termino mi ración de nutrición nocturna: He dejado de contabilizar las fotografía: Pero hallo algo sorprendente en sus diálogos después de cada visualización, después de cada fotografía: “Qué guay pal fotolog”