Girona en Agosto

Tras un año pasado en el que visité y me perdía constantemente en esta ciudad, he vuelto a ella. Es una ciudad, para olvidarlo todo y sumergirte en ella.

Ya no me pierdo, ya me siento de nuevo unido a otra cosa. No es placer, a veces se siente la necesidad de pertenecer a otro espacio y no al de siempre.

Una sucesión de recuerdos cuando mojándome corría por esas calles de piedra, corría a su vez por mi mente.Buscándo a veces en otros sitios te encuentras. En otros no encuentro nada, y es en ese preciso espacio donde siempre estás ausente con la única motivación de personas. Aquí a veces... la ciudad por sí sola hace que mis pisadas me hagan ser Yo.